Comenzó marzo, la primavera está ahí al lado y no sólo eso, es el mes de concienciación de endometriosis y pensé que sería buena idea comenzar con una serie de episodios en los que te hablaré de los tratamientos que se ofrecen actualmente para manejar endo, que muchos están influenciados por las teorías de que provoca endo, así que la idea es disectar eso un poco más .
Este es un tema grande y algo denso porque cada cual tiene sus ideas, preferencias y convicciones, por eso quiero aclarar que la información que te ofrezco hoy no pretende sustituír ningún tratamiento médico ni tampoco hacerte sentir o pensar que el acercamiento que estés llevando actualmente está bien o mal.
Cada endojeva es única y sus necesidades son muy específicas. Las circunstancias en las que uno está en ciertos momentos influencian nuestras decisiones y lo que hacemos, así que este episodio lo que pretende es darte información clara para que puedas tomar las mejores decisiones para manejar tu endo, dependiendo de los que necesitas ahora, pero también de lo que quieres alcanzar y lo que te gustaría lograr.
Como el episodio está cargado de información y sé que puede ser algo abrumador, quiero que se te haga fácil de digerir la información, así que te dejo la Guía de supervivencia para endojevas, donde explico en detalle los tratamientos: Desde medicamentos antiinflamatorios no esteroides, hasta los medicamentos y tratamientos hormonales, la cirugía y el acercamiento integral. Cosa de que tengas la información escrita y a la mano.
Vale comencemos:
La endometriosis es una condición inflamatoria crónica que afecta varios sistemas del cuerpo. Afecta el sistema reproductivo- que es el que más se relaciona a endo porque para muchas personas la condición se refleja en dolor durante la menstruación o durante la ovulación – pero endo también afecta el digestivo, urinario, nervioso, respiratorio, inmune, emocional y mental, sólo por mencionar algunos.
¿Entonces, cómo podemos definir endometriosis?
Endometriosis es una condición o desorden que ocurre cuando un tejido muy similar al que cubre las paredes internas del endometrio (útero) crece fuera de él. Y nota que digo un tejido similar al que crece en el útero y no el tejido del útero. Esto es importante y vas a notar por qué más adelante… Ese tejido puede aparecer en las paredes fuera del útero, en el intestino y la vejiga, en la zona de la pelvis,en ocasiones en otras zonas más allá de la región pélvica como tórax, pulmones, pecho, piel etc.. Durante la menstruación este tejido, similar al tejido que crece en tu útero cada mes, se hace grueso, se rompe y sangra. Sólo que al no tener por dónde salir, provoca quistes, adherencias, inflamación y en muchas ocasiones, dolor.
Y ahí es que damos con la primera serie de tratamientos que vamos a hablar hoy: Los medicamentos antiinflamatorios no esteroidales o AINEs.
Aunque algunas endojevas no presentan síntomas de dolor, éste sigue siendo uno de los síntomas más conocidos y frecuentes entre muchas personas con endo.
Es muy probable que estés familiarizada con el proceso. Primero comienzan por ofrecerte ibuprofen – que sabemos que para los dolores de endo no hacen ni cosquilla para detenerlos y luego proceden a los AINES.
Por si acaso, cuando hablamos de AINES piensa en Motrín, advil, naproxén, toradol etc. Son los medicamentos para el dolor más populares y varios de ellos accesibles para reducir inflamación o dolor. Por lo regular son píldoras o pastillas, pero también pueden administrarse intravenosas en el hospital. Es posible que hayas tenido ese viaje al hospital donde te dieron algún AINE intravenoso.
Que, dependiendo de la intensidad del dolor puede aliviar por cierto tiempo. Y cuando una está en un dolor agonizante, es algo necesario y muy apreciado. De hecho, si los dolores son cíclicos, muchos proveedores de salud recomiendan comenzar a tomar los aines de uno a dos días antes que llegue tu menstruación para ir aliviando la inflamación y que no sea tan fuerte el proceso una vez comienzas a menstruar y mantener el uso por la duración de los síntomas de dolor.
Ahora bien, como todo, existen pros y contras. Aunque los AINES nos ayudan a aliviar dolores su uso prolongado puede traer repercusiones.
Entre los efectos secundarios están que puede aumentar el riesgo de úlceras y/o sangrado gastrointestinal. Aumento de síntomas de asthma, aumento en el riesgo de ataques al corazón, aparición de coágulos y una tendencia a desarrollar moretones.
Así mismo, de entre los más comunes están irritación estomacal. Para algunas, recurrir a antiinflamatorios no esteroidales es algo así como desvestir un santo para vestir a otro. No sé si te ha pasado estar en esa indecisión de tomar los medicamentos o no cuando estás desesperada por aliviar el dolor pero sabes que probablemente vas a terminar casi con una gastritis porque tu estómago casi no tolera los medicamentos.
Otro efecto no muy agradable de los AINES es que afectan el medio ambiente gastrointestinal o la flora intestinal. Esto tiene sus repercusiones como problemas digestivos,, disbiosis y/o permeabilidad intestinal etc… que puede reflejarse en bloatedness o distensión abdominal, por ejemplo. De hecho es considerado uno de los posibles causantes de la famosa endobelly.
Y tal vez piensas “¿ya ahora que hago? No puedo sobrevivir sin medicamentos, pero estoy preocupada con todos esos efectos secundarios”.
Es normal que te sientas de esa forma. Y para nada estoy diciendo que dejes de tomar medicamentos. Sólo quiero que estés informada. Recuerda siempre que aquí lo importante es que tu estés bien y si para sobrevivir los síntomas de endo necesitas tomar medicamentos, por favor, hazlo. Si quieres encontrar algunas alternativas te invito a explorar.
Por ejemplo, en mi caso por ejemplo, llegó el momento en que no pude usar los AINES más pues era tomar uno y sufrir las consecuencias digestivas de una. Así que me vi forzada a tratar otras alternativas.
Muchas de mis clientas me preguntan que hago o qué puedo hacer. Mi acercamiento es integral y creo que poner curitas no es algo accesible a largo plazo, para lograr cambios a largo plazo es necesario hacer ajustes en nuestro estilo de vida, alimentación, manejo de estrés y mucho más. Pero entiendo que a veces necesitamos una solución y ya, así que aquí algunas ideas para que tomes en consideración:
- CBD o Marihuana – Hay quienes les funcionan tanto los ungüentos como los parches y/o supositorios de CBD, sobre todo los de espectro completo. Yo utilicé mucho una marca llamada Foria (y que conste no tengo ningún tipo de relación con ellos, sólo te cuento lo que me funcionó)
- Baños de sal de higuera – antes de que llegue tu periodo date baños con al menos una taza de sal de higuera o Epson Salts. El magnesio ayudará a relajar la zona.
- Trabajar la inflamación desde antes que llegue el dolor- Esta no es una tarea tan fácil y divertida, lo admito, pero brega. Entre las muchas cosas que puedes hacer están: hacer estiramientos gentiles, aumentar la cantidad de vegetales o tomar infusiones de jengibre y cúrcuma o incluso una mezcla de canela, anis y clavo de especia sigue estando entre mis favoritas.
Nena, espero que esta información te ayude. Si quieres tenerla a la mano, descarga la guía de supervivencia para endojevas.
Entra aquí para la segunda parte donde hablo más a fondo acerca de los tratamientos hormonales.
Un abrazo y seguimos.
¿Que te pareció? ¿Haz tenido problemas con los Aines? Cuéntame que piensas en los comentarios